El metaverso es un concepto que tiene ya varias décadas, pero en el que se han puesto los reflectores a nivel mundial luego de que Mark Zuckerberg, creador de Facebook, anunciara su intención de llevar a millones de usuarios de la red social a un universo digital, y del que expertos advierten diversos efectos asociados a esas interacciones.
Sin embargo, no sólo Zuckerberg piensa en las posibilidades que ofrecerá ese mundo virtual, “en esa plataforma de experiencia inmersiva que trasciende el dominio físico y el cibernético”, como lo describe Crispian Wong, Senior Manager, Asia, de Access Partnership, para quien la estrategia de Corea del Sur reconoce los elementos necesarios para construir un Metaverso seguro.
Si bien hay interés por desarrollar y capitalizar las oportunidades económicas que surgen de las nuevas tecnologías, con miras a convertirse en el quinto mayor mercado del metaverso en 2026, refirió que la estrategia del metaverso de Corea del Sur, basada en la colaboración entre los sectores público y privado, establece cuatro pasos principales:
En primer lugar, describió, se revitalizará el ecosistema de la plataforma aprovechando el contenido cultural coreano y desarrollando tecnologías y dispositivos básicos; se orientará a los talentos formados en el Metaverso y se les proporcionarán mayores oportunidades de participación empresarial práctica.
También se fomentará y subvencionará a las empresas que se dediquen al Metaverso para que alcancen la competitividad internacional, y en cuarto lugar, se desarrollará un espacio seguro y fiable de manera sostenible, teniendo en cuenta los principios étnicos y los valores de la comunidad, sin crear una brecha digital.
Crispian Wong prevé que cuestiones controversiales como el dominio de las plataformas, la confianza y la seguridad de los datos, la privacidad y la adecuación de las infraestructuras, seguirán existiendo, aunque en su opinión adquirirán otros matices como resultado de las características del Metaverso.
“También habrá consideraciones políticas multifacéticas sobre la legalidad y el valor de los activos digitales y los tokens no fungibles (NFT). La naturaleza inmersiva del Metaverso también puede plantear posibles problemas relacionados con el control parental sobre el alcance de las interacciones de los menores en el Metaverso”.
Sin embargo, el especialista consideró reconfortante que gobiernos e industrias reconozcan la necesidad de abrir un diálogo para guiar el desarrollo del Metaverso adoptando un enfoque de abajo hacia arriba, porque todas las partes deben trabajar para definir los principios fundamentales a los que deben atenerse la tecnología y los servicios del Metaverso.
A semejanza de Corea del Sur, que menciona en su estrategia los valores de la comunidad y el entorno, el experto consideró importante seguir algunos principios básicos para contar con un Metaverso seguro: apertura, interoperabilidad y un enfoque centrado en el ciudadano.
Es decir, el Metaverso debe ser abierto y de fácil acceso para todos, para lo cual el costo de acceso a este universo virtual y a sus servicios a través de diversos dispositivos, debe determinarse mediante una competencia de mercado justa, con una intervención de mercado ligera cuando sea necesario.
Sobre la interoperabilidad, recalcó que deben existir requisitos estandarizados que permitan el acceso al hardware y a los contenidos del Metaverso y su desarrollo en todos los ámbitos.
“Esto sienta las bases de un Metaverso abierto y competitivo que está en constante innovación. Además, los sistemas del Metaverso deben seguir y utilizar estándares abiertos para permitir el desarrollo comunitario de aplicaciones y contenidos, y para que dichas aplicaciones y contenidos sean compatibles en varios Metaversos”.
Asimismo, señaló que si bien tiene connotaciones distintas para diferentes personas, el objetivo general debe ser mejorar la vida de los ciudadanos situándolos en el centro del desarrollo del Metaverso.
“Una conversación honesta y sólida entre los gobiernos, las empresas y los individuos ayudará a minimizar las preocupaciones sobre las intenciones de cualquiera de las partes para el Metaverso. Una vez que se definan los principios clave y se acuerden por consenso, podrán proseguir los esfuerzos para que sea seguro y tangible para las masas”.
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