En un país como México donde aún falta camino por recorrer y mejorar en materia de accesibilidad tecnológica, la infraestructura digital es una pieza fundamental que requiere políticas públicas enfocadas a fomentar la inversión.
De acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la inversión en infraestructura digital en América Latina puede generar impactos muy positivos en los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) de las Naciones Unidas (ONU).
“Con solo un incremento del 10 por ciento de la inversión en los países de la región, cerca de 375 mil personas escaparían de la pobreza”, refiere con mayor precisión el estudio del BID, indicó Gustavo Gómez Caligaris, vicepresidente y Director General para la Región Norte de AT&T México.
En opinión del directivo, la infraestructura digital ayuda a impulsar soluciones inteligentes y eficientes al interior de las organizaciones, siendo pieza clave para el incremento de su productividad. Pero aun con los beneficios que brinda, la inversión requerida sigue siendo un desafío para países de ingresos altos y bajos.
“La infraestructura digital tiene múltiples ventajas como: el acceso a la información, la facilidad de horarios laborales flexibles y la eliminación de barreras de colaboración remota (CBI, 2017), lo que conlleva a una reducción de la congestión vehicular en las ciudades y al fomento del trabajo efectivo”.
Además, favorece a la expansión de nuevos sectores como el comercio electrónico, la bancarización digital (contribuyendo a la inclusión financiera) y a la ampliación de nuevos mercados y metas para las organizaciones.
Datos de la última Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH), indican que 78.3 por ciento de la población urbana es usuaria de internet, mientras que en las zonas rurales sólo es de 50.4 por ciento.
En cuanto a la edad, los datos son más contundentes pues son los jóvenes de entre 18 y 24 años quienes tienen mayor participación en el uso de la red con un 90.5 por ciento.
Sobre el número de usuarios de teléfono celular por entidad federativa; Ciudad de México y los estados del Norte como Sonora, la Península de Baja California y Nuevo León son los que tienen indicadores superiores al 84 por ciento.
Para Gómez Caligaris, estos datos reflejan las áreas de oportunidad que México tiene y la necesidad de contar con políticas públicas que fomenten nuevas inversiones para equilibrar las disparidades entre los estados y el uso de la tecnología en los trabajos.
“Desde su llegada al país en 2015, AT&T México ha invertido más de 10 mil millones de dólares en el despliegue de infraestructura digital, cubriendo a más de 100 millones de personas y conectando a más de 76 mil poblaciones en el país. Colaborando así con la nivelación de las disparidades tecnológicas y generando una mayor competitividad y experiencia para los usuarios”.
C$T-GM