Creciente acoso sexual a menores de edad en redes.
El Senado de la República presentó un punto de acuerdo para que la Procuraduría General de la República (PGR) a través de su unidad de policía cibernética, identifique perfiles falsos en las redes sociales que intercambian mensajes con menores de edad con fines de acoso sexual, conocido como grooming.
En el exhorto se señala que ante el crecimiento de usuarios de internet de los cuales 35 millones son niños, niñas y adolescentes, es necesaria la inmediata intervención de la PGR para investigar los hechos que se puedan relacionar con ese tipo de conductas, caracterizada por el intercambio de mensajes e imágenes de contenido sexual, lo cual puede desembocar finalmente en un encuentro entre el adulto y un menor de edad que generalmente desemboca en delitos como trata de personas, abuso o violación sexual.
La senadora Yolanda de la Torre Valdez, dijo que aunque no existe una legislación específica que tipifique el grooming, se tienen apartados en el Código Penal Federal equiparables, como es el título XV denominado “Delitos contra la libertad y el normal desarrollo psicosexual”, entre los que se encuentran el hostigamiento sexual, abuso sexual, estupro y violación.
Mencionó que estimaciones de expertos y la propia UNESCO, revelan que uno de cada siete menores de edad en México, ha sido víctima de ese tipo de conductas en la que el adulto abusador crea un perfil falso para obtener el control emocional del menor ya sea por seducción o amenaza.
De acuerdo a los distintos expertos, entre ellos Peris Pascual y Edreira que han estudiado el fenómeno del grooming, se presentan por lo menos cuatro fases en su desarrollo que son las siguientes:
1. De seducción: se construye subliminalmente la cárcel de cristal donde queda atrapada la víctima. En esta fase el acosador moral estudia y evalúa las cualidades de su futura víctima y localiza sus puntos débiles, suele averiguar todo lo que puede de la vida personal de la víctima.
2. Acoso manifiesto: donde se aplica la neurosis experimental, con acciones progresivamente más intensas y manifiestas hasta vencer la resistencia de la víctima. En esta fase se desestabiliza a la víctima para conseguir sumisión; usa técnicas de adoctrinamiento y lavado de cerebro.
Su objetivo es anular las capacidades defensivas y el sentido crítico de la víctima. Para ello utiliza la comunicación perversa: actitudes paradójicas, mentiras, sarcasmo, burla, desprecio.
3. Psico-terror o fase de confrontación: el objetivo es destruir al otro y provocar sentimientos, actos y reacciones para que la víctima parezca responsable de lo que sucede.
4. Violencia física mayor: el depredador “degolla” a su presa. Su objetivo es aniquilar al otro. Es una continuación de la fase anterior y se suele solapar con ella. Las agresiones físicas pasan a mayores en el caso de víctimas “resistentes”.
Por igual en el exhorto se convoca a la Secretaría de Educación Pública a emprender una campaña de concientización entre los padres de familia para que supervisen constantemente a sus hijos en el uso del internet y en su caso denunciar de inmediato ese tipo de conductas para la actuación de las unidades de inteligencia cibernética.
C$T-EVP





































