Con el Plan México, el país tiene condiciones para ubicarse en la economía número 10 del mundo, toda vez que cuenta con el capital humano y el talento suficiente para lograrlo, pero siempre será necesaria la participación del sector privado, al que el gobierno de la República invita a convertirse en aliados para crear esas condiciones.
Durante la inauguración del evento DigiEcon, organizado por la Asociación Latinoamericana de Internet (ALAI) y el Centro México Digital, David Flores, responsable de Industria Electrónica y Digital de la Secretaría de Economía, ratificó la vocación de colaboración del Estado con la industria para el impulso de la economía digital.
“Hoy día tenemos el Plan México y la aspiración de llegar a ser la economía número 10 del mundo. Tenemos las condiciones, el capital humano y hay el talento; tenemos que seguir atajando los distintos retos y les invitamos a que esta colaboración sea permanente; en la Secretaría de Economía y el gobierno de la República van a contar con aliados que saben que los entornos digitales son el futuro, el presente y debemos ir de la mano”.
Al hablar en nombre del secretario de economía, Marcelo Ebrard, quien se encuentra en Washington, en misión oficial atendiendo el difícil entorno de la aplicación de aranceles a productos mexicanos por parte de Estados Unidos, dijo que existe una nueva perspectiva en la dependencia de cómo la economía digital puede fortalecerse.
Para ello se requiere la participación de todos los sectores incorporados en el proceso de digitalización y donde se debe impulsar la capacitación para reducir la desigualdad y cerrar las brechas que existen en línea y fuera del ámbito digital, lo cual representa un reto para los gobiernos de la región y donde el diálogo respetuoso y permanente con la industria será fundamental.
Respecto a la relevancia del Plan México, René Orellana, gerente regional para México y Centroamérica del Banco de Desarrollo para América Latina y el Caribe (CAF), lo demostró “muy potente, muy ambicioso”, y está a la altura de los grandes retos de este período histórico, el cual es muy complejo.
Explicó que las incertidumbres geopolíticas actuales son muy importantes, pero “no serán capaces de limitar significativamente este crecimiento innovador del ámbito digital y de la Inteligencia Artificial, si los países de América Latina y el Caribe tenemos la capacidad de construir planos orientados a expandir el crecimiento vigoroso de la innovación digital y la infraestructura digital”.
El directivo de CAF, -que cuenta con la participación de 25 países incluyendo a México como inversionista-, aseguró que la institución financiera tiene como principios centrales, la certeza de que la inclusión genera mercados más prósperos y extiende el comercio; fomenta la posibilidad de desarrollar emprendimientos y por lo cual esta época debe observarse no sólo por las incertidumbres existentes, sino también como un tiempo de fomentar redes colaborativas. “Es, sin duda, una época de darnos la mano”.
En coincidencia con lo anterior, Salma Jalife, presidenta de Centro México Digital, aseguró que “América Latina se encuentra en un momento definitorio. La economía digital está transformando no sólo la forma de trabajar, de comunicarse y vivir, pero también invita, “casi exigiendo” a repensar los modelos de desarrollo vigentes.
Por ello destacó la relevancia del encuentro en el que participantes representantes de varios países, incluyendo México, Argentina, Brasil, Costa Rica, Uruguay, Guatemala, Perú y República Dominicana, para discutir sobre temas cruciales del desarrollo digital de la región.
La construcción de una economía digital incluyente que no deje a nadie atrás; políticas públicas que impulsan la innovación sin sacrificar derechos; la Inteligencia Artificial y su impacto en el mundo laboral; cómo crear ecosistemas seguros para impulsar las empresas financieras de base tecnológica, son algunos de los temas que en su opción son impresecindibles de abordar.
No obstante, la protección de la infancia en los entornos digitales; la creación de un futuro donde la tecnología sea un elemento de crecimiento y no de riesgo y la urgencia de cerrar las brechas en el mundo digital, son otros de los temas invitables y necesarios de discutir a nivel regional.
Sobre este último tema, Pedro Less Andrade, vicepresidente de ALAI, reconoció que así como en otros aspectos, en el tema de desarrollo digital, la región de América Latina mantiene profundas desigualdades “dentro de nuestros países y economías, donde a veces las inversiones en conectividad, infraestructura y desarrollo de talento, son desiguales”.
Recordó que de acuerdo con la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), en 2015 cuando se creó la ALAI, en la región había 300 millones de usuarios de Internet, cifra que actualmente ha crecido ay 500 millones,
lo que representa el 75 por ciento de la población de la región.
Esto significa que “nos falta ese 25 por ciento (de la población) todavía y vamos a seguir trabajando para que estas personas se puedan conectar”, porque la conectividad implica acceso a derechos y la posibilidad de participar en la economía digital, además de que lleva a la inclusión al sistema financiero, entre otras cosas.
C$T-EVP