Tener una hija o hijo puede despertar el instinto protector de un adulto, pero en el ecosistema digital asegurar la protección de un menor puede ser igual o más complicado; no bastan las técnicas, consejos o conocimientos aplicados por generaciones anteriores ante la velocidad de un cambio tecnológico que no da tregua, incluso en cuanto al lenguaje. Siempre hay nuevos términos para definir nuevas tecnologías, plataformas, gadgets y demás elementos que forman parte de este mundo interconectado.
Los peligros asociados a la Dark Web se suelen debatir con bastante frecuencia, pero a muchas personas, ya sea madres, padres o tutores de menores de edad todavía no les queda claro el funcionamiento de estos sitios y los riesgos que representan, aseguraron expertos a Digipadres, una propuesta educativa de ESET para crear conciencia de los riesgos en Internet.
“Aunque uno pensaría que las peores cosas suceden en la Dark Web, muchas interacciones problemáticas pueden tener lugar en la capa más accesible, la Surface Web. Por ejemplo, un acosador a menudo no necesita nada más que las plataformas de aplicaciones de chat comúnmente disponibles para comunicarse con los niños”.
Y por ello conocer la relación entre la Surface, Deep y Dark Web permitirá establecer los mecanismos de control y la comunicación correcta con los niños, niñas y jóvenes, a lo que se suma la recomendación de no prohibir, porque ésto sólo fomentará su curiosidad.
La Surface Web o red superficial es la capa más accesible de Internet, donde se pueden ver páginas indexadas. Está conformada por sitios web de acceso público que los usuarios pueden encontrar mediante motores de búsqueda de Internet como Google, DuckDuckGo o Bing.
La Deep Web o red profunda está disponible sólo para ciertos grupos de personas, por lo que si un usuario quiere buscar ciertos contenidos u obtener acceso a ellos necesita software o herramientas especiales, o privilegios de acceso, porque estas páginas no están indexadas para aparecer en un motor de búsqueda.
En una capa más profunda está la Dark Web o red oscura. Esta no está indexada por los motores de búsqueda y se ejecuta en una infraestructura oculta que les proporciona anonimato a sus operadores y usuarios, por lo que requiere de un software especializado como TOR o el servicio I2P (Invisible Internet Project).
Aunque pudiera pensarse que en la Dark Web sólo existe contenido ilegal, además de contenido perturbador como foros de suicidios, en esta capa también hay una gran comunidad de lectores, aunque el material puede ser cualquier cosa, desde libros educativos y de ficción hasta publicaciones con ideologías extremistas.
Sin embargo, Ondrej Kubovič, especialista en concientización de seguridad de ESET, subrayó que se tendría que explicar a los menores de edad, en especial a los adolescentes, que los riesgos son mayores en la Dark Web y que es más probable que se encuentren con un estafador ahí que en la Internet común.
“Acceder a la Dark Web requiere conocimientos y experiencia. La mayoría de los niños y niñas no suelen sentir la necesidad de entrar a la Dark Web. Para aquellos pocos que lo hacen, esto probablemente no sucederá antes de la pubertad, principalmente por los conocimientos técnicos que se necesitan para acceder, pero también por la lentitud de carga”
En caso de tener una fuerte sospecha de que un o una adolescente está activa en la Dark Web, el experto recomienda verificar los sistemas operativos y el software instalados en sus dispositivos; buscar TOR (The Onion Router), I2P, Freenet; aplicaciones que configuran una red privada virtual (VPN) ; o el uso de sistemas operativos como Whonix, Subgraph, Tails o Qubes, así como instalar software parental para bloquear sitios.
“No les prohíbas acceder a la Dark Web, ya que sólo fomentarás su curiosidad. Si eres un padre o madre conocedora de la tecnología puedes mirar algunos sitios junto a ellos para demostrarles que no son tan interesantes. Trata de explicarles lo que puede suceder si visitan la Dark Web, o qué información sobre ellos puede aparecer allí si comparten demasiados datos personales en las redes sociales de la Surface Web”.
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