Hogares más ricos destinan 1.2% de su ingreso a estos servicios
La profunda diferencia de ingresos entre los hogares más ricos y los más pobres, define el nivel de consumo y asequibilidad a servicios de telecomunicaciones móviles, lo cual constituyen un reto para el Estado, que debe impulsar medidas de competencia y reforzar el desarrollo de políticas públicas y sociales para cumplir cabalmente con el derecho constitucional de la inclusión digital universal.
Indicadores del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y el INEGI, destacan que por la amplia brecha que prevalece entre los ingresos de los mexicanos, el 97 por ciento de los hogares que pertenecen al decil más rico (X) contaron, en 2014, con servicios de telecomunicaciones móviles, mientras que sólo 48 por ciento de los hogares del decil con el menor nivel de ingresos tuvo acceso a esos servicios.
En cuestión de gasto, el estudio realizado por The Social Intelligence Unit (SIU) indica que mientras los hogares del decil más pobre sólo destinaron 428 pesos trimestrales en promedio al servicio de telecomunicaciones móviles, los hogares del decil más rico gastaron mil 726 pesos.
Lo anterior significa que los hogares más pobres gastaron alrededor de una cuarta parte de lo que destinaron los más ricos en los servicios mencionados. Estadísticamente, por las diferencias en el nivel de ingresos, los hogares más ricos sólo destinaron para servicios móviles 1.2 por ciento de su ingreso promedio, en tanto que en los hogares más pobres, además registrar un menor consumo, el gasto representó 6.2 por ciento de su ingreso.
Por otra parte, entre los deciles II y IX, la proporción de gasto promedio en estos servicios varió entre 2.9 por ciento y 1.5 por ciento del total de sus respectivos ingresos corrientes.
«Estas profundas diferencias entre los hogares más ricos y los más pobres en cuanto al consumo y asequibilidad de servicios de telecomunicaciones móviles constituyen un argumento para reconocer la importancia del derecho a las TIC».
Ante ello se enfrenta el reto de proseguir en el avance de la reforma de telecomunicaciones que aliente más la competencia y políticas públicas que permitan el acceso de toda la población a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), tal y como lo mandata el artículo sexto constitucional.
«El Artículo 6° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos reconoce el derecho al acceso a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), señala que el Estado garantizará una política de inclusión digital universal para integrar a la población a la sociedad de la información y el conocimiento».
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