La Inteligencia Artificial puede ayudar a los operadores de telecomunicaciones a mejorar sus márgenes de utilidad, siempre que la utilicen para actualizar los servicios existentes, desarrollar otros nuevos e integrar la tecnología en todo el ecosistema, aseguró James Chen, presidente de negocios de operadores de Huawei.
“Estamos parados frente a la puerta de entrada de la Inteligencia Artificial, la cual cambiará las cosas, porque el nuevo corazón de la comunicación está hecho de esta tecnología”, aseguró, al advertir que si las compañías quieren mantener la competitividad, deben entender los cuatro “nuevos”: es decir, nuevos hub, nuevos servicios, nueva experiencia y nueva operación.
Durante el 10º. Foro de Ultra-Banda Ancha (UBBF 2024), realizado en Estambul, dijo que el lema de esta cumbre (“Toda la inteligencia con UBB avanzada”) cobra relevancia por la necesidad que tienen los operadores de aplicar nuevos esquemas que les permitan seguirle el paso a un mercado donde el promedio de velocidad de la ultra-banda ancha alcanza los 570 Mbps, lo cual es 100 veces más rápido que hace 10 años y donde ya existen mil 328 modelos grandes de lA, entre ellos Chat GPT, el cual cuenta con 190 millones de usuarios activos en el mundo.
De hecho, la IA Generativa es capaz de incrementar el Producto Interno Bruto global en 7.0 por ciento, lo cual significa alrededor de 7 trillones de dólares; de ahí la importancia de voltearla a ver no sólo como una herramienta capaz de manejar la enorme cantidad de datos que algunos casos de uso exigen (como los vehículos autónomos que pueden generan 100 mil millones de puntos de comunicación de datos), sino también como un potente elemento de monetización.
En el mismo foro, pero en ponencia por separado, León Wang, presidente de Línea de Productos de Comunicación de Datos de Huawei, aseguró que para respaldar a sus clientes en todo el mundo, la firma creó una herramienta de generación de código impulsada por IA, que permite ahorrar 10 mil horas-persona al mes en el transcurso de un año, al tiempo de multiplicar por 10 la seguridad en su manejo.
Esto es relevante porque precisamente los operadores de telecomunicaciones se encuentran en un momento de “abrazar activamente las nuevas oportunidades y desarrollar estrategias de Inteligencia Artificial” para darle a los clientes los productos que requieren, bajo los cuatro “nuevos” a los que se refirió anteriormente James Chen.
Explicó que las distintas generaciones de las telecomunicaciones se han distinguido por servicios específicos: la 1G estuvo relacionada con servidores; la 2G, con PC´s; la 3G con la red; 4G con la telefonía móvil; 5G con la nube y 5.5G con la Inteligencia Artificial, tecnología que permitirá encontrar nuevos casos de uso qué monetizar por parte de los operadores.
A manera de ejemplo, señaló el caso de uno de sus clientes en China, quien ofrece experiencias premium en el sector de seguros; cobertura ultra confiable en el transporte; alta eficiencia para computación inteligente y seguridad y protección inteligente, todo ello gracias al enorme poder de la IA que –insistió—debe ser aplicada lo mismo como una herramienta al servicio de los clientes, que como una fórmula para la innovación de los servicios que permita elevar la rentabilidad.
Además, es importante incorporar la herramienta para defenderse de los ciberataques, porque la delincuencia usa, precisamente, esa misma tecnología para atacar, lo que lleva a consecuencias severas como que la red y las aplicaciones puedan quedar hasta 6 horas fuera de servicio; un incidente pueda impactar hasta 8 millones de personas y el costo de los ciberataques se eleve hasta en 28 por ciento.
En síntesis, la era de la IA está ya entre nosotros y el reto para los operadores es aplicarla de manera eficiente tanto para beneficiar a sus clientes, como para encontrar fórmulas de monetización que permitan hacer frente a los decrecientes márgenes de utilidad y a las enormes inversiones que, en lo inmediato, exige la implementación de tecnología 5G y en el futuro lo 5.5G.
C$T-GM