Big Data y IoT, tendencias que plantea utilizar.
Si bien el próximo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador tiene como eje central de sus propuestas la vinculación de las nuevas tecnologías al desarrollo de varios sectores, especialmente al de la educación, es claro que su administración enfrentará grandes retos relacionados con la brecha digital, la infraestructura y el analfabetismo digital.
«La estrategia del próximo sexenio sin duda es crucial para comenzar con una educación tecnológica. Sin embargo, antes se debe consolidar una vasta infraestructura que fortalezca las instituciones educativas y así se logre capacitar a toda la plantilla educativa. De esta manera se impulsará la apropiación de las TIC a nivel nacional», señaló la firma OFI.com.mx
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Disponibilidad y uso de la Tecnología 2017, en el área urbana 71.2 por ciento de la población de seis años y más se reportó como usuaria de la tecnología e Internet, mientras que en el ámbito rural el nivel es solo de 29.1 por ciento.
«Ello, refleja que solo 63.9 por ciento de los ciudadanos mexicanos tiene acceso a estos avances, evidenciando una clara brecha digital. Este término hace referencia a la desigualdad entre los ciudadanos que pueden tener acceso o conocimiento con relación a las nuevas tecnologías».
En México, las zonas rurales e indígenas del país son las más afectadas. Una de sus principales dificultades es la falta de infraestructura digital debido a que las empresas de telecomunicaciones tienen preferencia por invertir en áreas urbanas o con potencial de venta, por lo que México ocupa el lugar 62 en el índice de competitividad mundial por la calidad de Infraestructura digital, según datos de INFOTEC.
Debido a la ausencia de infraestructura, de las TIC o falta de capacitación sobre las mismas se da el analfabetismo digital, un vocablo que describe el desconocimiento sobre las tecnologías más simples de información y la nula capacidad de obtener beneficios a partir de su adecuado uso.
El índice de la OCDE “Perspectivas de la Economía Digital 2017”, indica que sólo 30 por ciento de las personas entre 55 y 74 años de edad están conectadas, mientras que este porcentaje crece hasta 90 por ciento en jóvenes entre 16 y 24 años.
«El panorama se vuelve desalentador cuando se analiza que actualmente la mayoría de los maestros se encuentran en ese rango de edad. Donde su inclusión digital es meramente recreativa, desconociendo cómo aprovechar las herramientas digitales, dando como resultado un analfabetismo digital que deja atrás la economía e influye directamente sobre los avances que se deseen aplicar en esta materia».
Al respecto, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) afirma que las TIC tienen un impacto positivo en la educación; sin embargo, el país se encuentra rezagado en ese aspecto, pues de acuerdo con datos del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA) sólo 60 por ciento de los estudiantes evaluados en México usaron una computadora como parte de su proceso educativo.
La firma proveedora de productos y soluciones de tecnología para corporativos refirió que algunas tendencias tecnológicas que López Obrador ha planteado utilizar son:
·Big Data: Gracias a esta tecnología se podría otorgar una enseñanza personalizada, donde se lograría evaluar la metodología del docente, así como el estilo de aprendizaje de los alumnos, disminuyendo la tasa de deserción. Algunos de los países que ocupan esta técnica son: EUA, China y Chile.
·Internet de las cosas: Entre los beneficios de aplicar esta tecnología se encuentra el de observar variables fisiológicas en el estudiante, monitoreo de habilidades en tiempo real, excursiones virtuales, intercambio de información y seguridad. Se valora que el mercado de la educación tecnológica valdrá 252 mil millones de dólares en el 2020. Los países que han comenzado a implementarla son: Estados Unidos, España y Suecia.
La digitalización en diversos sectores es una tendencia que ha impactado al país llevándolo a la revolución 4.0, por lo que de ser totalmente aplicadas las herramientas tecnológicas beneficiarían a México mediante la transformación de sus industrias con mayor calidad, competitividad y transparencia en los procesos.
«Las nuevas tecnologías son una oportunidad invaluable para mejorar la educación en todos los niveles y ser más competitivos a nivel internacional. Sin duda primero existen grandes pasos por recorrer, el éxito solamente se logrará de la mano del sector público y privado. Sin dejar a ningún nivel socioeconómico atrás», enfatizó Peter Ostroske, CEO de OFI.com.mx.
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