Prevén incremento de ataques “Zoombombing”.
Ante un escenario en el que las clases a distancia podrían continuar durante todo el año, tanto docentes como alumnos tienen que estar conscientes de las ciberamenazas a las que podrían enfrentarse, y como en algunos casos no son tan fáciles de identificar para quienes empezaron a usar la modalidad remota apenas hace un año, con gran desconocimiento del ecosistema digital y presionados por la contingencia sanitaria.
“Gracias a la gran cantidad de herramientas educativas digitales que llegaron para quedarse es muy probable que la digitalización educativa continúe y se potencialice como medio para fortalecer la enseñanza, aunque también podría traer consigo nuevas amenazas cibernéticas”, alertó Kaspersky.
En 2020 la educación echó mano de las plataformas para videollamadas, y de manera importante de aplicaciones muy populares, como WhatsApp, y redes sociales como TikTok, utilizada por algunos maestros para distribuir de una manera atractiva el contenido de sus clases.
Además de esas herramientas, se prevé que durante este año aumente la popularidad y número de usuarios de los LMS (Learning Management System), que son sistemas de gestión de aprendizaje, que permiten a los profesores revisar el progreso de sus estudiantes, por ejemplo Google Classroom.
A la par, advierten los expertos, también crecerá el número de sitios phishing asociados a servicios educativos y de videoconferencias, que tienen como principales objetivos robo de datos personales o la difusión de spam, siendo la privacidad la principal preocupación del futuro.
Incluso, podrían aumentar los ataques denominados “Zoombombing”, que se dan las plataformas de comunicación en tiempo real, y en la que los hackers o “zoom bombers” irrumpen en los espacios virtuales donde se encuentran los grupos conectados para difundir contenido inapropiado, agresivo u ofensivo, o incluso propicio para el ciberacoso.
El aumento en la creación de videos educativos, que se comparten en Youtube, Netflix, SchoolTube y Khan Academy, es otro punto a tomar en cuenta, pues si bien han sido considerados una poderosa herramienta educativa, hay que tener cuidado con los niños y niñas porque en esas plataformas hay mucho contenido inapropiado que puede encontrarse fácilmente.
En cuanto a la privacidad, los especialistas subrayan que una aplicación o servicio mal configurado “es una puerta abierta hacia los datos personales, en este caso, los de maestros y estudiantes, que podrían ser víctimas de ataques”.
Y si bien se han reconocido los beneficios de los videojuegos en el proceso educativo, hay que tomar en cuenta que los estudiantes pueden enfrentarse a trolls y al ciberacoso, archivos maliciosos disfrazados de actualizaciones o complementos del juego que no lo son en realidad.
“Para cada herramienta y en cada caso tendrán que prestar especial atención a la protección no sólo de su información personal, sino también de los datos de sus estudiantes”, señaló Dmitry Bestuzhev, director de Investigación y Análisis para América Latina en Kaspersky.
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