Una cruzada educativa para no dejar a nadie fuera de la digitalización, acompañada de políticas públicas para el desarrollo de polos tipo “Silicon Valley” o semilleros de talento en Tecnologías de la Información (TI) en todas las regiones del país, es el llamado de los sectores industriales para avanzar con paso firme hacia la cuarta revolución industrial.
“Se tiene que alinear, tener un pacto educativo para México, una cruzada educativa para asegurarse de no dejar a gente fuera de la digitalización, porque ese es el grave riesgo”, aseveró Jorge Castilla Ortuño, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria de Tecnologías de la Información (AMITI).
En su participación en el panel “Ecosistemas industriales a partir de la nueva realidad”, el especialista advirtió que ahora ya no hay empresas que no sean de tecnología, por lo que el reto está en llevar el talento nacional al nivel que se requiere, en un futuro en el que se tendrían impactos importantes en las cadenas de suministro, y en la integración de industrias.
“Los modelos de negocio que estaban muy establecidos y con los cuales se competían se cuestionan y se cuestionan fuertemente, y la tecnología es el habilitador principal… Eso adicionalmente incluye a la ciberseguridad, que se vuelve uno de los principales riesgos en todas las empresas, no importa el tamaño. Esto es una oportunidad gigante”.
Por separado, en el panel “La tecnología como motor de crecimiento”, Carlos Funes Garay, ex presidente de la Canieti se pronunció por una política pública práctica que impulse polos de desarrollo tecnológico en el país, que integre toda una visión nacional y apalanque todas las oportunidades como la de contar con tratados de libre comercio, la creatividad y lucrar con el conocimiento que se genera en el país.
Tras subrayar como una ventaja de México su cercanía geográfica con el principal creador de tecnología, Estados Unidos, el cual tiene entre 5 y 10 millones de vacantes en el sector, Carlos Funes aseguró que las condiciones están dadas para tener un crecimiento exponencial.
“La carretera está lista, lo que nos falta es integrar una visión, dedicarnos a tres o cuatro cosas fundamentales: talento, convertir otras industrias, educación dual, política pública e inglés, con lo que los nuevos profesionistas serán automáticamente los nuevos emprendedores, los que van a exportar servicios, atender a un cliente en Estados Unidos”.
Aseguró que en México no se tiene una cultura de lucrar con el conocimiento, por lo que se debe cambiar esa idea, e insistió en tener esa visión de política pública para exponenciar todo.
“Hace falta una política pública práctica, sencilla, desarrollar muchos Jaliscos; sin duda, Jalisco y Yucatán son dos ejemplos clave, uno es nuestro Silicon Valley maduro, con tres o cuatro generaciones se ha transformado, otro es una gran semilla, otro es Guanajuato, y Nuevo León con su palanca industrial, pero tenemos que replicar eso, en todo el país, en todas las regiones”.
Flor López Cárdenas, HP Director Guadalajara Site & IT Governance, Compliance and Vendor Performance reconoció que aunque hay talento, esto no es suficiente, sino que será necesario asociarse entre empresas, incluso con otros países, para extender las buenas prácticas y explorar desde hoy la tecnología del futuro.
“Sí hay muchos centros de investigación que cada una de las empresas tiene, pero no hay uno realmente donde vayan todas juntas, a donde se lleven a los gurús de las diferentes compañías y se sienten ahí a generar un nuevo producto, esa parte no la tenemos y creo que nos hace mucha falta”.
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