Hay disciplina entre deportistas electrónicos.
La popularidad de los videojuegos es evidente pues a nivel regional México es el primer consumidor y ocupa el lugar número 12 en el mundo, y si bien la industria tiene un alto componente publicitario relacionado con el consumo de comida chatarra, la afición a estas herramientas tecnológicas puede alinearse con hábitos saludables.
Los expertos de la UNAM, Adolfo Gracia Vázquez y Emmanuel Galicia Martínez, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), refieren que los videojugadores mexicanos están migrando de los medios tradicionales a plataformas streaming con una alta exposición a anunciantes de comida con bajo valor nutritivo.
“Hay una serie de elementos que contribuyen a esta situación: vivimos en una sociedad consumista, en la que tener más se refleja en los hábitos alimenticios. Además, hay un cambio de consumo de medios: la gente pasa horas frente a las pantallas y en las redes sociales, y cada vez más se suman a la digitalización”, explicó Gracia Vázquez.
Sin embargo, en opinión del especialista, los videojuegos se pueden adaptar para fomentar hábitos saludables mediante tecnologías como la Realidad Aumentada (RA) que permite a los usuarios tener actividad física y social más dinámica.
Otro ejemplo de cómo los videojuegos pueden ser una alternativa para mejorar la salud de los niños y jóvenes son los deportes electrónicos o Esports donde los participantes se preparan con la misma disciplina, buenos hábitos y estrictos códigos que siguen los deportistas tradicionales.
“Científicos estadounidenses hicieron un estudio con 46 niños de entre 10 y 12 años; un grupo accedió a videojuegos que implicaban movimiento y otro se quedó sentado frente a la pantalla. El primer equipo redujo su masa corporal en 3.0 por ciento y su colesterol en 7.0 por ciento, mientras que el segundo los incrementó”.
Partiendo de estos resultados, subrayaron los expertos de la UNAM, en México se podrían usar los videojuegos para controlar y manejar la obesidad en niños, un problema de salud pública cada vez más fuerte.
Dado que existe una íntima relación entre la publicidad, las marcas de alimentos chatarra y los videojuegos, añadieron, es fundamental que los padres de familia se acerquen a los niños y jóvenes para saber qué tipo de contenidos están consumiendo y privilegiar aquellos que los inviten a mejorar sus hábitos, actividad física y socialización.
C$T-GM