Pese a que las mujeres están generalmente subrepresentadas entre las ocupaciones más expuestas a verse afectadas por la Inteligencia Artificial (IA) y otras tecnologías, en general ellas enfrentan riesgos frente a los avances tecnológicos, incluso si cuentan con estudios superiores, revela un estudio de la OCDE.
En el documento denominado “Algoritmo y Eva: cómo la IA afectará a las mujeres en el trabajo”, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), advierte que hay subrepresentación de mujeres en las profesiones más expuestas, como lo son las direcciones ejecutivas, profesionales de las tecnologías de la información y profesionales de los negocios, entre otros.
Al respecto, el informe de políticas públicas, detalla que “las ocupaciones de profesional de la tecnología de la información, director ejecutivo y profesional de la ciencia y la ingeniería tienen una representación femenina inferior al 35 por ciento, aunque las mujeres representan más de la mitad de los profesionales de la empresa, también muy expuestos”.
El estudio analiza 38 ocupaciones que agrupa en tres bloques: los más expuestos, los de exposición intermedia y los de menor exposición y donde en general se observa un orden decreciente de educación superior en los empleados tanto hombres como mujeres.
La profesión más expuesta para las mujeres y donde la enorme mayoría cuenta con estudios universitarios, es la de profesional de la enseñanza, seguida por la de profesional de la salud, también ampliamente dominada por mujeres con nivel universitario.
Le siguen las profesionales en temas legales, de cultura y ciencias sociales y también las profesionistas de los negocios. Estos roles reflejan rangos de posible afectación a las mujeres con educación superior, que van desde casi 50 por ciento, hasta alrededor del 60 por ciento.
El estudio de la OCDE se basa en información comparable enviada por 21 países en Europa y Estados Unidos, donde se analizan las actividades que más podrían verse afectadas por la IA y otras tecnologías en el futuro.
“La elevada representación de las mujeres en las profesiones de oficina, podrían correr un riesgo especial de automatización por los recientes (y futuros) avances de la IA generativa”, advierte el documento. Algunas de estas actividades son empleados generales, empleados de atención al cliente y de contabilidad.
En el extremo opuesto de la tabla, es decir, las actividades que menos se pueden ver expuestas por la aplicación de tecnologías disruptivas, muestra un comportamiento donde las mujeres que cuentan con menos educación serían las que más riesgo enfrenten.
Así por ejemplo, las empleadas del cuidado personal; de la limpieza y ayudantes; personal asociado a la salud y asistentes y operadores del sector de la alimentación, también se verían afectadas en amplios rangos, que van desde casi el 70 hasta casi el 90 por ciento de los casos, en personas con estudios de nivel medio superior o inferiores, aunque se trate de actividades menos propensas a verse modificadas por la tecnología.
Por otra parte, el estudio determinó que los hombres con menores niveles de educación con actividades que dependen en gran medida de habilidades manuales y fuerza física como peones, basureros, empleados metalúrgicos, operadores de maquinaria, conductores y trabajadores de la construcción, entre otros, “no están muy expuestas a la IA pero corren un alto riesgo de automatización de todas las tecnologías”.
Incluso, “trabajos anteriores de la OCDE muestran que los hombres tienen más probabilidades de ocupar empleos con mayor riesgo de automatización (es decir, de todas las tecnologías, no sólo de la IA) que las mujeres”.
C$T-GM