Con el objetivo de incentivar el hábito de la lectura, facilitar el acceso a los libros, y contribuir a la igualdad de oportunidades, el diputado Damián Retes del Partido Acción Nacional (PAN) planteó adicionar una fracción IX al artículo 151 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta para incluir en la deducción de gastos personales la adquisición de libros impresos y digitales.
“Esta medida puede tener efectos positivos a largo plazo en términos de productividad y crecimiento económico, ya que diversos estudios han demostrado que una población más educada tiende a ser más productiva y a generar mayores ingresos, lo que se traduce en un crecimiento más sostenible”, indicó un comunicado publicado por la Cámara de Diputados.
La iniciativa enviada a la Comisión de Hacienda y Crédito Público destaca que la deducción fiscal para la compra de libros impresos y digitales disminuiría la carga económica que representa para muchas familias mexicanas el adquirir este tipo de contenidos, y hará que más personas tengan acceso a los conocimientos que ofrecen los textos.
“La lectura es una herramienta esencial para el desarrollo cognitivo y emocional; por ello, permitir que un mayor número de personas accedan a los libros contribuye a la construcción de una sociedad más educada, informada y consciente”.
En el documento de la iniciativa se explica que en otras naciones se han aplicado medidas fiscales para promover el acceso a los libros y fomentar el hábito de la lectura con mucho éxito al observarse un aumento en el consumo de libros por lo que esta medida representaría “una inversión en el bienestar social” del país y un factor positivo para el desarrollo económico de México.
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