No es menor el número de casos en que el robo de un celular concluye en delitos mayores, pues los delincuentes al tener posesión del dispositivo accederán a las aplicaciones y cuentas bancarias, el correo electrónico y redes sociales, donde hay una gran cantidad de datos expuestos, con lo cual pueden obtener desde un préstamo, hasta vaciar el saldo de las tarjetas de crédito, cuentas de ahorro o billeteras digitales.
Por ello, Camilo Gutiérrez Amaya, Jefe del Laboratorio de ESET Latinoamérica, habló de la conveniencia de además de reportar el robo en las plataformas digitales, es indispensable denunciar el hurto ante las autoridades y mejorar la seguridad para prevenir futuros inconvenientes.
Más allá del robo del smartphone, los delincuentes pueden escalar a delitos mayores al acceder a las cuentas, que también lo pueden hacer a través de correos de phishing, con perfiles falsos en Facebook o Instagram que se hacen pasar por oficiales, explotando vulnerabilidades o fallos de seguridad en las apps o las plataformas.
“Muchas personas que perdieron sus teléfonos o fueron víctimas del robo también sufrieron el robo del dinero de sus cuentas de Mercado Pago… En varios casos los ciberdelincuentes incluso sacaron un préstamo a nombre de la víctima desde la app”, comentó.
El experto añadió que este año en países como Argentina se registraron gran cantidad de denuncias de personas que fueron víctimas de robo de teléfonos y luego les vaciaron las cuentas de sus billeteras digitales.
Por ello ante un robo, los usuarios deben seguir las instrucciones de Android y de iOS para bloquear un teléfono perdido o borrar los datos que tenga almacenados. Una vez que se recupera el acceso, se debe cambiar la contraseña y utilizar una nueva, que no se utilice para acceder a otro servicio, pero además que sea lo más compleja posible, pero fácil para el usuario.
Es fundamental activar la autenticación en dos pasos para añadir una capa adicional de seguridad y que sea más difícil acceder a la cuenta desde otro dispositivo. Otro punto clave, destacó ESET, es activar la huella digital, PIN o patrón en el dispositivo, pues de esta manera se podría solicitar la huella o clave cada vez que deseemos realizar un movimiento.
En caso de que el robo de una cuenta haya sido como consecuencia del robo del teléfono, también se recomienda dar de baja el chip y solicitar una tarjeta SIM nueva.
Además de reportar la situación en la plataforma, se debe hacer la denuncia ante las autoridades, pues esto ayuda a dimensionar la cantidad de víctimas de este tipo de delitos informáticos.
“Si la persona no denuncia no es posible tener datos que permitan cuantificar el impacto y alcance de este tipo de fraudes. En este sentido, vale la pena mencionar el trabajo de organizaciones como ODILA (Observatorio de Delitos Informáticos de Latinoamérica), que recibe denuncias que pueden ser reportadas de forma anónima y proporciona al denunciante información sobre la legislación en su país y dónde puede realizar la denuncia formal para que pueda ser investigado”.
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