Contar con un plan de comunicación, buena práctica.
A nivel mundial, millones de personas atienden el llamado de quedarse en casa como una de las medidas de prevención recomendadas para enfrentar la pandemia de Covid-19, y en este contexto el trabajo remoto es más que nunca una actividad esencial que trae consigo desafíos en términos de productividad y entusiasmo de los colaboradores.
“El liderazgo no tiene por qué verse comprometido en línea. La situación por la que pasamos abre otros espacios y puentes de colaboración para afrontar los desafíos de las empresas”, señala Isidro Quintana, director general de Cisco México.
En un artículo titulado “Guía de liderazgo para el trabajo remoto”, el ejecutivo señala que establecer metas y desarrollar un plan de comunicación, son algunas prácticas que ayudarán a que el trabajo remoto sea eficaz.
Establece las metas y expectativas a tiempo.
Si eres líder de un equipo, asegúrate de ser claro en cuanto a los objetivos y tiempos de entrega de los proyectos. A veces trabajar a la distancia puede dar la sensación de poca organización; sin embargo, contar con un calendario definido y roles de trabajo específicos, es un paso fundamental para que los procesos se completen y los colaboradores se sientan más tranquilos y en control de sus tareas.
Desarrolla un plan de comunicación.
La comunicación proactiva hace toda la diferencia. No es suficiente tener varias juntas al día o un chat con el equipo de trabajo, una estrategia de comunicación abarca ciertos acuerdos para construir canales en los que los colaboradores se sientan cómodos para comunicarse y plasmar sus dudas. Además, esto evitará que se pierdan mensajes o se retrase la comunicación, lo que puede impactar en el trabajo.
Acompaña a los líderes de otros equipos
Si hay liderazgo en la oficina, también estará presente de forma virtual. Tener contacto con líderes de equipo te ayuda a tener una visualización completa de los procesos y las cargas de trabajo. Una buena idea es tener llamadas privadas regularmente para dar status e intervenir a tiempo en caso de que estén teniendo dificultades con algún proyecto.
No perder perspectiva de los tiempos.
Uno de los errores más comunes en los que podemos caer en cuanto a trabajo remoto es perder de vista los tiempos. Con tantos pendientes y proyectos, es fácil que las cargas de trabajo se vean sobrepasadas y los colaboradores pasen mucho más tiempo conectados. Tener esto en claro y fijar tiempos de entrega realistas, harán que todos puedan acomodar su calendario y que puedan dedicar parte del día a su vida personal.
“Tener un trabajo organizado y con buena comunicación nos ayudará a generar valor como líderes. Es momento de abrirnos a nuevos aprendizajes y dinámicas, crear nuevos puentes entre todos para salir de esta situación”.
C$T-GM