El próximo 28 de agosto se conmemora en México el día de la Persona Adulta Mayor, población que ha sido vulnerable a lo largo de la pandemia por COVID-19, no sólo en el ámbito de salud física, sino también en el aspecto emocional, social y digital.
El uso de tecnología ha beneficiado en distintos ámbitos a la población a lo largo del confinamiento; sin embargo, también ha presentado dificultades para una gran cantidad de personas mayores de 60 años, sobre todo en su socialización.
Conforme envejecemos, los vínculos de amistad cambian y pueden disminuir por diversas causas, como la viudez, jubilación, conclusión de la trayectoria educativa, la disminución de participación en actividades sociales o la presencia de padecimientos que afectan la funcionalidad de la persona, entre otros motivos.
Por ello, se considera importante fomentar, propiciar y fortalecer las relaciones de amistad durante todo nuestro curso de vida y, sobre todo, en la vejez.
A pesar de que con el uso de la tecnología se han intentado diferentes formas de continuar con el desarrollo social durante la pandemia, por ejemplo, conversar con amigos y familiares por videollamadas u ocupar plataformas como Netflix para ver películas y series al mismo tiempo sin estar físicamente presentes, estas actividades son más fáciles de llevar a cabo por personas jóvenes, pues están acostumbrados a su uso.
Desde abrir aplicaciones de mensajería como whatsapp para saludar a algún amigo o familiar, subir una foto para compartir cómo va tu vida ocupando Instagram, hasta realizar una videollamada por zoom o meet para ver y conversar con tus seres queridos y poder estar protegidos al mismo tiempo, son actividades que parecen sencillas y accesibles para todas y todos, pero no es así.
En 2021, muestra la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH), mientras que la población joven de 18 a 24 años, fue la que más accedió a internet, el menor uso de esta tecnología se ubicó entre las personas de 55 y más años.
Otro dato importante es que nueve de cada diez personas usuarias de teléfono celular disponían de un smartphone que les permitió conectarse a internet, sin embargo, no todo es tener un teléfono que pueda acceder a internet, también hacen falta conocimientos y habilidades digitales para poder sacar el máximo provecho.
Pensemos, ¿Cuántas veces hemos visto a una persona adulta mayor en aprietos con un teléfono? Tal vez hayamos escuchado las frases: “No sé qué se le puso”, “No sé qué le piqué”, “No me deja entrar”, “Agrándale la letra porque no le veo” u otras de quienes no hacen uso de ellos por miedo por ejemplo: “Yo ni le sé a eso”, “Mejor no lo uso, no lo vaya a descomponer” y muchas más frases que hacen visible la frustración y pocos conocimientos que tienen esta población con respecto a la tecnología.
Este es un factor de la reducción de su socialización, pues al experimentar frustración e impotencia, se reducen las posibilidades de ponerse en contacto con seres queridos, mandar mensajes a amigos y familiares.
El hecho de que las y los adultos mayores posean conocimientos y herramientas para hacer uso de la tecnología puede traer muchos beneficios:
Fomenta las relaciones intergeneracionales. La persona en esta etapa de la vida descubre intereses comunes con sus familiares más jóvenes, permitiéndole pasar con ellos momentos agradables que refuerzan los lazos afectivos, además con estas herramientas no importa el espacio físico ni el tiempo, por lo que el adulto mayor se puede relacionar, informarse, comprar, vender, realizar trámites y llevar a cabo otras actividades a pesar de tener algún tipo de dificultad que le impida el movimiento. También se quitan las barreras de la distancia, los horarios, los cambios de clima y otros inconvenientes que son resultado de su edad.
Otro de los beneficios que el uso de los medios digitales proporcionan al adulto mayor es ayudarlo a superar el miedo a la soledad y al aislamiento. El ciberespacio es una alternativa que aumenta la posibilidad de interactuar y elevar la autonomía personal.
Hasta aquí todo parece de maravilla, sin embargo, es importante que existan programas que ayuden a desarrollar e impulsar las habilidades digitales de esta parte de la población, pero también que contribuyan a concientizar sobre la importancia de incluir y visibilizar su presencia en el mundo digital.
Afortunadamente hay algunos avances al respecto, por ejemplo, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) realiza acciones de alfabetización digital a favor de las personas adultas mayores en México.
Este año, a través del Programa de Alfabetización Digital 2022 (PAD 2022) la entidad busca contribuir a reducir la brecha digital y promover el empoderamiento de los usuarios, a través de cursos, charlas y talleres presenciales o en línea, así como la generación de guías y tutoriales que permitan capacitar, informar y sensibilizar a la población.
De hecho, el Instituto ya cuenta con una Guía para el Uso de Teléfonos Celulares dirigida a Adultos Mayores, donde se explica de forma clara cómo encender un celular, realizar llamadas, enviar mensajes, conectarse a internet, tomar fotografías, entre otros.
También nosotros podemos realizar pequeñas acciones que generen grandes resultados, por ejemplo, poner atención y paciencia en auxiliar a los adultos mayores, siendo empáticos y comprensivos con ellos, explicándoles con claridad cuando nos piden auxilio en hacer uso de la tecnología, seamos sus acompañantes en este camino, antes que hacerlos sentir juzgados o torpes.
En algún momento de nuestra vida tendremos que recurrir también a apoyo, la tecnología avanza con gran velocidad y desconocemos a qué retos tengamos que enfrentarnos cuando entremos en la etapa de la vejez, evitemos ser un motivo más de exclusión para ellas y ellos.
En suma, establecer relaciones de amistad en la vejez favorece el óptimo estado de salud físico, mental y emocional, promoviendo el bienestar integral de las personas mayores. Es por ello que contar con una red de apoyo como amigos, una actividad que les haga sentir felices, útiles y acompañados en estos momentos son vitales para su calidad de vida. Y es aquí donde la tecnología juega un papel crucial, pues puede potenciar o frenar que estos aspectos se lleven a cabo.
Seamos un puente para que los adultos mayores puedan acceder a una vida más digna, más social y más digital.
C$T-GM