Trivia: en este país de la zona del TLCAN se desarrollará una red inalámbrica de telecomunicaciones utilizando espectro de la banda de 700 MHz con un esquema de asociación público-privada (APP).
Esta red operará como mayorista, podrá aprovechar infraestructura de telecomunicaciones existente y dependerá de un consorcio privado para su desarrollo. Su despliegue está ordenado por la ley y permitirá modernizar las comunicaciones para corporaciones de auxilio aprovechando tecnología de banda ancha móvil. ¿De qué país se trata?
Si su respuesta fue Estados Unidos, felicitaciones, pues está en lo correcto. La First Responder Network Authority (FirstNet) ordenada desde 2012 por el Congreso de ese país está en proceso de definir qué consorcio desarrollará este proyecto de red abierta inalámbrica encaminada específicamente a la modernización de las comunicaciones de seguridad pública.
Ni México ni países en desarrollo son los únicos que han optado por el desarrollo de redes abiertas inalámbricas.
La exploración de modelos de redes abiertas inalámbricas en otras latitudes es una buena oportunidad para hacer un “zoom out” a la Red Compartida y ubicarla en el contexto de uno de los diferentes modelos de redes de “acceso abierto”.
El trabajo de la OCDE “Broadband Networks and Open Access” sugiere una definición práctica para el concepto de “redes abiertas”: son entidades o estructuras que dan acceso a capacidades de infraestructura de una red que actúa como proveedor mayorista a precios razonables y con base en criterios no discriminatorios y transparentes.
Estas redes pueden ser cableadas, inalámbricas, de última milla o de transporte. Estas redes tienen un elemento regulatorio para operar como agentes mayoristas con obligaciones de no discriminación y transparencia en tarifas.
En este sentido, la diferencia entre redes abiertas y operadores que ofrecen voluntariamente servicios como mayoristas reside en obligaciones regulatorias, entre las que se encuentran la no discriminación en precios a los clientes potenciales y el impedimento de ser un proveedor minorista.
Por ejemplo, un Operador Móvil Virtual (MVNO) interesado en obtener capacidad de redes de AT&T o Telefónica, puede ver tarifas diferenciadas con respecto a otros MVNO competidores. En cambio, una entidad como la Red Compartida no podría ejercer discriminación tarifaria entre MVNO que busquen ser sus clientes.
La Red Compartida nace en un contexto en el que ya hay prácticas enfocadas a fomentar el “acceso abierto” a redes de telecomunicaciones en varias partes del mundo, principalmente las cableadas.
La desagregación de la “última milla” de redes telefónicas o DSL de operadores dominantes es un ejemplo de acceso abierto a una parte específica de la red. El objetivo en este caso específico era intercambiar la competencia en infraestructura en “última milla” (no siempre viable para competidores) por competencia en servicios al consumidor pagando al operador propietario de dicho segmento por su uso.
Los proyectos de acceso abierto han evolucionado con el paso de los años. Uno de los modelos consiste en redes abiertas basadas en tecnologías como fibra óptica con diferente alcance (última milla, transporte, o nodos).
Uno de los casos más conocidos es la Red Nacional de Banda Ancha (National Broadband Network) en Australia, pero también existen municipalidades en Suecia y algunas ciudades de Estados Unidos que operan redes de acceso a Internet que incluso llegan a hogares de los consumidores, pero que dan exclusivamente acceso mayorista a los proveedores de Internet.
Por otro lado, en América Latina existen proyectos en Chile, Colombia y Perú para desarrollar redes troncales de fibra óptica con políticas de acceso abierto para robustecer la infraestructura de los operadores que brindan acceso a Internet a la población.
Casos como la Red Compartida en México, la red mayorista LTE en Ruanda y FirstNet en Estados Unidos representan la exploración de las redes abiertas pero basadas en el acceso inalámbrico y manteniendo condiciones como no discriminación y provisión de servicio mayorista.
FirstNet representa una aplicación específica de este modelo (modernizar comunicaciones de seguridad pública), mientras que las redes mayoristas en México y Ruanda pretenden generar elementos de infraestructura para masificar el acceso a Internet. Pero no son por sí solas las únicas políticas de acceso abierto en plataformas inalámbricas.
Licitaciones recientes de espectro en países como Perú obligan a los ganadores de nuevas licencias a alojar MVNO, por ejemplo, o en el caso mexicano la regulación asimétrica obliga a Telcel a proveer acceso como mayorista a MVNO y otros operadores de telecomunicaciones.
Ubicar a la Red Compartida en el contexto de las “redes abiertas” se propone en este espacio como un marco analítico para el futuro de este proyecto en función del plan de negocio que tenga el consorcio ganador del proyecto.
El proyecto de la Red Compartida no es el único que ha enfrentado oposición; el proyecto australiano e incluso FirstNet han recibido críticas por su diseño como redes abiertas, pero la evaluación de estos proyectos depende al final de la ruta del alcance de los objetivos de política pública con el que surgen.
En este caso, opiniones basadas en fundamentalismo de doctrina política o económica pueden errar el pronóstico a favor o en contra de esta clase de proyectos si no adaptan la “lente” con la cual los analizan.
Asumir a las redes abiertas inalámbricas como equivalentes de operadores comerciales puede llevar a pronósticos o conclusiones imprecisas o a contradicciones entre posturas que promueven regulación fuerte de “acceso abierto” en elementos como la última milla, pero que censuran otros proyectos como la Red Compartida a pesar de estar basadas en el mismo criterio de acceso abierto.
Sin conocer el plan de negocio del ganador de la APP para desarrollar la Red Compartida es difícil prejuzgar a favor o en contra del proyecto.
Se perciben elementos estructurales que podrán incentivar la inversión, como el valor de los derechos del espectro de 700 MHz y la posibilidad de utilizar elementos de infraestructura existente, pero el plan para adquirir los clientes potenciales (no limitados a MVNO u operadores móviles) permitirá tener mejores bases analíticas sobre el proyecto.
C$T-EVP