A dos años de la emisión de políticas de competencia para acotar el poder de mercado de Televisa y América Móvil, los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión mantienen virtualmente la misma estructura de distribución de suscriptores y audiencia. Las descripciones de participaciones de mercado brindan información parcial sobre el desempeño competitivo, pues no siempre reflejan factores dinámicos en el sistema.
El caso de Telcel y su posición en el segmento celular es útil para mostrar cómo una observación sobre un momento del mercado es insuficiente para describir el comportamiento de un sistema en competencia.
En efecto Telcel, mantiene más de dos terceras partes de los usuarios móviles y 71 por ciento de los ingresos de este servicio a nivel nacional.
Pero fue Telefónica el proveedor que captó más suscriptores netos durante 2015. Entre marzo y diciembre de ese año el operador español agregó 2.36 millones de abonados netos, contra 1.6 millones de Telcel.
Esta diferencia es más amplia si se comparan los últimos trimestres de 2014 y 2015, en donde Telefónica agregó 3.2 millones de suscripciones netas contra 2.2 millones de Telcel.
En otras palabras, la fotografía de la distribución actual del mercado se puede beneficiar del análisis de indicadores que tomen en cuenta el comportamiento dinámico del mismo sistema.
Un mercado como sería el de las telecomunicaciones constituye un sistema complejo en donde las condiciones no son estáticas. Su distribución puede cambiar siempre y cuando existan posibilidades de transición (como sería cambiar de proveedor de servicios), independientemente del tamaño inicial de las participaciones de mercado.
Este mes se cumplen dos años de la emisión de reglas específicas para Televisa y América Móvil, declarados como Agentes Económicos Preponderantes (AEP) en radiodifusión y telecomunicaciones por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
El artículo octavo transitorio de la reforma de telecomunicaciones denomina así a los grupos económicos que tengan más de 50 por ciento de participación nacional en términos de usuarios, suscriptores, audiencia, tráfico o capacidad de sus redes.
Entre marzo y noviembre de 2016, el IFT evaluará el impacto de estas reglas. Es poco realista esperar que las reglas derivadas de la declaratoria de preponderancia puedan corregir en 24 meses elementos como la magnitud de las redes.
Por ejemplo, la red de fibra óptica de América Móvil superaba 194 mil kilómetros en 2015, un elemento de infraestructura que no puede ser replicado fácilmente. Si Axtel-Alestra quisiera replicar en extensión esta red de fibra, tendrían que multiplicar su tendido actual cinco veces para acercarse.
En cambio, estas reglas buscan emparejar factores para permitir que pueda existir competencia a pesar de tener mercados concentrados. Entre las herramientas se encuentran la obligación de interconectar redes, el desbloqueo de celulares y acceso a infraestructura.
El mismo artículo que define la preponderancia en la constitución, señala que las obligaciones a los AEP pueden existir cuando hayan condiciones de competencia efectiva, no competencia perfecta.
Los mismos AEP y algunos competidores dan indicios de que vienen cambios en sus mercados relevantes, sobre todo tomando en cuenta la entrada o consolidación de nuevos competidores.
En televisión abierta, Cadena Tres inicia operaciones en 2016 como la tercera cadena nacional; Televisa inició una revaloración y reestructura de su portafolio y esquema publicitario acompañado del lanzamiento de una aplicación de video sobre Internet. TV Azteca, en turno, sustituyó a su director general y por ahora ha relanzado la marca de sus canales de televisión.
América Móvil anunció una reducción de gastos de capital para 2016, pero estos no tocarían a la red LTE, que es una de las áreas en donde se anticipa presión competitiva. Tanto AT&T como Telcel adquirieron espectro adicional en la banda 1.7/2.1 GHz en subasta de febrero.
En conjunto pagarán más de 45 mil millones de pesos al Estado, alrededor de 24 mil 231 millones a valor presente. Como resultado de este concurso, AT&T se consolida como el mayor concesionario en la sub banda AWS-1 de la franja 1.7/2.1 GHz utilizada actualmente para las redes 4G LTE de AT&T y Telcel.
Y aunque Telcel adquirió más espectro en términos agregados en la subasta, dos terceras partes de esta capacidad están en la sub banda AWS-3 aprovechable comercialmente entre 2017 y 2018.
Además de estos movimientos, los precios de servicios de telecomunicaciones se redujeron 14.5 por ciento durante 2015, concretamente 16.8 por ciento los servicios móviles. Esto ocurrió, según el IFT, por una mayor diversidad de ofertas comerciales de AT&T, Telefónica y algunos operadores móviles virtuales.
En síntesis, en 2015 se registró una mayor diversidad de ofertas acompañada de precios más bajos, un resultado deseable en política pública de competencia pero que difícilmente se refleja en un gráfico de participaciones de mercado.
La revisión de la preponderancia no consiste en revisar gráficas de distribución de suscriptores, sino en analizar cómo las nuevas reglas del juego modifican la dinámica interna del sistema para lo cual se requiere, además, que los usuarios tengan acceso a la oferta comercial de más competidores en su mercado local.
C$C-EVP