El gobierno de la 4T ha sido un feroz combatiente de las “fake news”, pero pareciera que sólo cuando afectan sus intereses, y para muestra, los contenidos que el Sistema Público de Radiodifusión (SPR) ha difundido en torno a la licitación de espectro para servicios móviles que aprobó el IFT, y en los que, ya sea por mera ignorancia o por malicia, le quitan el reflector al verdadero beneficiario del nuevo marco regulatorio en el sector telecomunicaciones.
El pasado viernes 27 de diciembre, se transmitió un “reportaje” en Canal Catorce en el que se asegura que la licitación IFT-12 otorga un “beneficio claro a una de las compañías no preponderantes extranjeras en el mercado mexicano”.
Sin más prueba ni argumento técnico que los dichos de “dos analistas del mercado consultados” y cuyos nombres desconocemos porque no se mencionan, el trabajo realizado a partir de una columna firmada por Jenaro Villamil, director del SPR, deja en claro algunas graves fake news:
*La licitación busca beneficiar a un sólo operador*. Sí, pero pero podría tratarse del Agente Económico Preponderante en Telecomunicaciones (AEP-T). Para nadie es un secreto que los altos costos del espectro radioeléctrico son la principal barrera para la colocación de este recurso en el mercado, como tampoco lo es el hecho de que en las condiciones actuales el único operador capaz de participar y comprar espectro adicional sería América Móvil, es decir, Telcel.
Y es que, además de tener el 70 por ciento del mercado, Telcel es el mayor tenedor de espectro radioeléctrico en México, por lo que un proceso de licitación como el que planeó el IFT y que ahora el gobierno federal busca frenar, resultaría en una mayor distorsión del mercado, mayor acaparamiento de espectro y el consecuente incremento de la preponderancia de este operador.
La gran pregunta entonces es cómo le puede beneficiar a un operador un proceso de licitación que ofrece espectro radioeléctrico a precios impagables. Una simple búsqueda en Google arroja una decena de notas periodísticas en la que se consigna cómo desde mayo pasado, Mónica Aspe, CEO de la firma, aseguró que la firma no entrará a ningún proceso de licitación que podría estar diseñado para un solo operador.
*El IFT se fue por la libre y no le consultó a la SHCP*. Si se tuviera el buen hábito de la lectura, se vería que el artículo 99 de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión obliga al IFT a solicitar la opinión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, pero esta entidad no está obligada a contestar; es más, la ley señala que su opinión ni siquiera es vinculante.
*Los comisionados del IFT “quisieron dar un albazo”*. Que el gobierno federal y los opinadores allegados no supieran de la licitación IFT-12, las dos consultas públicas que se realizaron desde hace dos años y las opiniones emitidas por la industria, no significa que este proceso fuera un secreto. Una mirada rápida a los planes de trabajo del IFT derriba este argumento.
Si bien es cierto que con el nacimiento del IFT se dio paso a una era regulatoria sin precedentes en materia de preponderancia, hay que decir que tal como señala Ernesto Piedras, analista del sector y director de la consultora The CIU, la dieta impuesta a América Móvil no funcionó y por el contrario “subió de peso”.
Esto se evidencia al revisar cómo su participación de mercado se ha visto prácticamente inalterada después de la segunda revisión bienal por parte del IFT, al pasar de 57.8 por ciento a 55 por ciento, es decir, una reducción de sólo 2.8 puntos porcentuales en tres años.
Aunque en marzo pasado, el dueño de América Móvil, Carlos Slim, se “tiró al suelo” asegurando que la oferta de Telmex ya no es competitiva y por lo tanto su negocio no es rentable, en el mercado móvil la realidad es muy diferente y a su favor, pues sólo en este segmento acumula ingresos equivalentes al 70 por ciento.
Incluso, desde la óptica de la consultora The CIU, a una década de la regulación asimétrica, el AEP-T se ha dedicado a buscar cómo incumplir o dar revés a este marco que le es aplicable, en lugar de transitar a un piso parejo entre operadores y condiciones de competencia efectiva.
“Además, se ha valido de la falta de supervisión y sanción al incumplimiento para que las medidas de regulación asimétrica cumplan con su cometido. Al mismo tiempo, pretende que se le habilite su incursión en el segmento de TV de paga para ganar más participación de mercado”.
Es una verdadera lástima que desde un medio público se institucionalicen fake news y verdades a medias. En fin, por sus “análisis” los conoceréis.
C$T-GM