¡Quien ofrece consejo no pedido, pierde consejo y amigo! eso mismo puede estarle pasando a Grupo Televisa, que recibió el rechazo contundente de Megacable, a su propuesta de fusionar los negocios telecom de ambas empresas, pues aunque esto pudiera generar la segunda operadora más fuerte del país, es posible, que la repartición accionaria del 45/55 en favor de la televisora, no sea del agrado de los accionistas de la empresa asentada en la perla tapatía.
Como lo destaca el reciente análisis de la consultora The Competitive Intelligence Unit (CIU), los procesos de integración en el sector han sido útiles para consolidar la presencia de un operador, así como para la generación de ahorros convenientes tanto en lo operativo, como en la erogación de recursos para el despliegue de infraestructura, especialmente en una industria intensiva en flujos de inversión.
Generación de eficiencias de costos y mayores capacidades de invertir en el desarrollo de la infraestructura, así como el fortalecimiento de un operador que al aligerar su estructura de costos y capacidad de alcance en el mercado su oferta suele ser más atractiva para el usuario final, detonando un mayor dinamismo competitivo en el resto de los competidores, son algunas de los factores que favorecen los procesos de integración, señala la consultora.
Aunque la propuesta trascendió desde el 14 de noviembre pasado, fue hasta el 13 de diciembre a través de un comunicado al público inversionista de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), que la televisora reconoció que “ha sostenido discusiones bilaterales con Megacable” respecto a una propuesta no vinculante de la transacción al Consejo de Administración de Megacable”.
“Una fusión de Televisa Cable en Megacable a través de un intercambio de acciones con una prima de aproximadamente 19 por ciento para los accionistas de Megacable, en la cual los accionistas de Megacable y Televisa serían titulares de aproximadamente el 45 y 55 por ciento de la compañía combinada… también la posibilidad de que, al cierre de la transacción, los accionistas de Megacable reciban un dividendo especial en efectivo de aproximadamente 14.8 mil millones de pesos”.
No obstante, el pasado 13 de diciembre Megacable, a través de un comunicado en la misma instancia, la BMV, respondió que el 14 de noviembre recibió de Grupo Televisa una propuesta “confidencial que no fue solicitada”, la cual tenía como propósito combinar los negocios de televisión restringida, telefonía y acceso a internet de ambas compañías.
“El Consejo de Administración de Megacable analizó ampliamente la Propuesta y el pasado 8 de diciembre del año en curso, por unanimidad resolvió rechazarla de plano y en su integridad dado que el plan de negocios actualmente aprobado por dicho Consejo, ofrece mejores perspectivas de largo plazo para Megacable y sus inversionistas… Megacable no está a la venta”, precisó la emisora.
Los expertos de The CIU destacan que el ente resultante de la integración, contaría con una mejor posición para competir en el mercado de contenidos audiovisuales, algo oportuno de considerar dada la creciente competencia que hay en este segmento, así como también en el negocio de banda ancha intensivo en inversiones en infraestructura.
“La posición financiera de las compañías se fortalecería y permitiría apalancar el alcance y la suficiencia de las inversiones en infraestructura al evitar redundancias y reducir los costos de despliegue. En particular, fortalecería la trayectoria ascendente de Megacable que solo este año espera adicionar 15 ciudades”.
El análisis de The CIU también anticipa ventajas en la fusión, pues de 476 municipios donde proveen servicios de telefonía fija, Televisa y Megacable, sólo en 29 existe redundancia de oferta, es decir en sólo en 6.1 por ciento compiten directamente.
El comportamiento es similar en los servicios de Banda Ancha Fija no satelital (sin considerar Sky) donde de un total de 478 municipios donde brindan ambas empresas este tipo de servicios, sólo en 29 compiten directamente.
Por último, la consultora analizó la complementariedad de las redes a través de los servicios de televisión restringida no satelital (sin considerar SKY), la competencia directa se da sólo en el 5.7 por ciento de los municipios en los que ambas empresas tienen presencia y compiten directamente.
“La unión de estos operadores representa una oportunidad inigualable para complementar sus redes fijas y poder competir en mejores condiciones operativas, robustez de inversiones, cobertura, capacidad y calidad de las redes, ante el fortalecimiento que registran operadores competidores como es el caso de Totalplay y la persistente concentración de mercado a favor del agente económico preponderante en telecomunicaciones (AEP-T, América Móvil)”, concluye The CIU.
Sin embargo, ¿será que en el Consejo de Administración de Megacable estarán valorando que “mejor solos que mal acompañados” del Agente Económico Preponderante en Radiodifusión (AEPR)?, que es mejor ser «cabeza de ratón que cola de león» o es que ¿buscarán que la propuesta de tenencia accionaria de Televisa sea revisada a la baja? Lo cierto es que es posible prever que ni la televisora dejará de insistir en sus pretensiones, ni Megacable podrá hacer oídos sordos. Al tiempo.
C$T-GM